Vandalismo en el área paleoarqueológica de Junín: preocupación por la destrucción de cartelería informativa

Junín enfrenta un nuevo acto de vandalismo que pone en riesgo su patrimonio natural y paleontológico.

La cartelería informativa instalada en la ribera del río por el Museo Legado del Salado, con el objetivo de señalizar y proteger el área paleoarqueológica, fue destruida.

Este hecho genera preocupación entre los especialistas y defensores del medioambiente, quienes denuncian la falta de respeto por un sitio de gran valor histórico y científico.

Marcela Torreblanca, profesora de biología y referente del Museo, expresó su desazón por los daños sufridos en el área. “Estamos pidiendo también que cuiden el yacimiento y no transiten por ese lugar con motos. Los carteles señalan los sitios donde hay fósiles”, afirmó.

La especialista destacó la importancia de que los visitantes puedan observar los restos fósiles sin intervenir en el sitio, ya que su estudio se realiza en el lugar donde fueron hallados.

El área paleoarqueológica de Junín alberga fósiles de animales prehistóricos que habitaron la región hace aproximadamente 15 mil años. Entre los hallazgos más destacados se encuentran restos de dientes de sable y megaterios.

Sin embargo, Torreblanca advirtió que la falta de cuidado por parte de ciertos sectores de la comunidad podría llevar a la suspensión de la colocación de nueva cartelería. “Aún no habíamos terminado de identificar los otros sitios donde se encontraron restos fósiles importantes, pero si no los cuidan, no los vamos a colocar”, advirtió.

El vandalismo no es un hecho aislado en la zona. Según Torreblanca, los carteles instalados anteriormente por el Municipio también fueron destruidos, quedando en pie solo uno de ellos. “Los otros carteles artesanales los hacemos a pulmón: los cortó Carlos, los pinté yo y los colocó el arqueólogo”, explicó, resaltando el esfuerzo personal detrás de la señalización del área.

Otro problema que agrava la situación es la circulación de motos por la ribera y el lecho del río, lo que genera un impacto negativo en el yacimiento. “Están las huellas de motos. Ya se hizo la denuncia al secretario de Seguridad, Lisandro Benito. Las motos no deben circular por ahí debajo en la ribera ni por el lecho”, enfatizó Torreblanca.

Además, el Museo notificó a la empresa YPF para que colabore en la protección de la zona del poliducto que cruza por el lecho del río.

Ante estos hechos, las autoridades y los referentes del Museo evalúan nuevas estrategias para resguardar el sitio, incluyendo la realización de actividades privadas con acceso restringido. “Lamentablemente, hay que restringir para poder proteger”, concluyó Torreblanca.