14/12/2025 - Edición Nº388

Junín

espacio envolvente

Debut capitalino de Lautaro Ferrari en el Teatro Border con “La Mano de Dios”

13:11 | La función se desarrolló en una atmósfera atravesada por la energía Terra Takyon, con una escenografía especialmente consagrada para la ocasión. Se trata de un espectáculo que fusiona espiritualidad, poesía escénica y un lenguaje performático profundamente sensorial.



El Teatro Border fue escenario del debut capitalino del juninense Lautaro Ferrari con su obra La Mano de Dios, un espectáculo que fusiona espiritualidad, poesía escénica y un lenguaje performático profundamente sensorial.

La función se desarrolló en una atmósfera atravesada por la energía Terra Takyon, con una escenografía especialmente consagrada para la ocasión. El diseño escénico creó un espacio envolvente, donde la luz y el rito convivieron con la narrativa, potenciando la vivencia emocional del público y generando una experiencia inmersiva poco habitual en la cartelera porteña.

La noche contó con la participación especial del DJ Toro, quien musicalizó en vivo, y de Sundari Bliss, que elevó el clima espiritual con mantras, guitarra y voz. Ambas intervenciones se entrelazaron de manera orgánica con los momentos clave de la obra, amplificando su impronta vibracional y reforzando el carácter ritual del espectáculo.

“La Mano de Dios” incluyó cinco cuentos teatralizados, cada uno acompañado por objetos rituálicos en cerámica creados por el propio Ferrari. Estas piezas únicas funcionaron como símbolos y portales narrativos dentro de la escena, guiando al público por un tránsito emocional que osciló entre lo devocional, lo humorístico y lo sutilmente iniciático.

Con esta propuesta, la obra se posiciona como una experiencia novedosa dentro de la escena independiente de Buenos Aires, tendiendo un puente entre el arte escénico, la espiritualidad contemporánea y la vivencia sensorial.

Este debut marca para Lautaro Ferrari el inicio de una nueva etapa artística, atravesada por la integración de lo performático, lo terapéutico y lo sagrado, consolidándolo como una voz emergente que aporta una estética distinta y profundamente personal a la cartelera cultural porteña.