
Vialidad Nacional informó esta noche que, en el marco de los parámetros establecidos por la Ley de Bases para la continuidad de las tareas viales, todas las intervenciones iniciadas o próximas a iniciar sobre las rutas nacionales de todo el territorio nacional continuarán su curso normal.
No obstante, “se inició un procedimiento para realizar el cierre administrativo de aquellos contratos que se encontraban paralizados y que no han sido reactivados a lo largo de un sinfín de gestiones que utilizaron los fondos públicos de forma deficitaria”, explicaron.
Dentro de los mencionados contratos, se encuentran un grupo de obras que estaban comprendidas en las concesiones finalizadas 2018 y que, a la fecha, no se había procedido al correspondiente cierre.
“Cabe destacar que en aquellas secciones donde existen contratos vigentes, aunque los mismos estén paralizados, no es posible celebrar nuevos contratos que permitan generar las condiciones necesarias para hacer un uso eficiente de los recursos disponibles”, explicaron.
En efecto, continuará pendiente la transformación en autopista de la Ruta Nacional 7, que cuenta con la suspensión de trabajos en la variante de Chacabuco y en el tramo Chacabuco - Carmen de Areco, desde diciembre de 2023, entre otras obras situadas en la región noroeste bonaerense.
A poco más de un año de la asunción de Javier Milei como presidente, las rutas nacionales del país muestran signos evidentes de abandono, más allá del corte de pasto en las banquinas, que municipios y vecinos tuvieron que hacerse cargo.
La falta de mantenimiento en la calzada, con aparición de nuevos baches y demarcaciones desgastadas, sumada a la paralización de obras viales clave, como la de la autopista de Ruta 7, han convertido a la infraestructura vial en un serio problema para los conductores.
El estado de las rutas nacionales en el noroeste bonaerense es alarmante. Desde hace un año no se realizan tareas de bacheo ni repintado de la calzada en la 7 o 188, lo que compromete la seguridad de quienes transitan diariamente por estos caminos.
Las quejas de transportistas, automovilistas y vecinos de la región son constantes, denunciando el deterioro progresivo de las rutas y el incremento del riesgo de accidentes, mientras se sigue cobrando los peajes.
El ministro de Infraestructura bonaerense, Gabriel Katopodis, legisladores, intendentes, concejales y la subsecretaria de Transporte aéreo y Fluvial de la Provincia de Buenos Aires, Valeria Arata, entre otros funcionarios, firmaron el mes pasado una presentación judicial contra el Gobierno nacional por el "desvío de fondos" y "deterioro" de las rutas nacionales.
El encuentro se llevó a cabo en la Plaza Belgrano de la ciudad de Luján, donde, tras suscribir el documento, los dirigentes del peronismo y aliados brindaron una conferencia de prensa.
Es importante recordar que la actividad contó, además, con intendentes de ciudades de la región como Leo Boto (Luján), Ariel Sujarchuk (Escobar), Diego Nanni (Exaltación de la Cruz), Iván Villagrán (Carmen de Areco), Marisa Fassi (Cañuelas), Germán Lago (Alberti), Sergio Barenghi (Bragado), Daniel Stadnik (Carlos Casares), Darío Golía (Chacabuco), Alberto Gelené (Las Flores), Walter Wischnivetzky (Mar Chiquita), Julio Marini (Benito Juárez), Matías Nebot (Saavedra), Sergio Bordoni (Torquinst), Nelson Sombra (Azul) y Marcos Pisano (Bolívar).
Por Junín, además de Arata estuvieron presentes las concejales Maia Leiva y Francina Sierra, y el funcionario provincial Lautaro Mazzutti.
En este contexto, la dirigente del Frente Renovador Valeria Arata dijo: “Nos manifestamos en el día de hoy reclamando la terminación de las obras en la autovía de la Ruta Nacional N° 7 y del resto de las rutas del país”.
Además, “firmamos una presentación judicial para que se investigue al Gobierno Nacional sobre el destino de los $200 mil millones que se recaudaron a través del Impuesto a los Combustibles, que cada habitante del país paga cada vez que carga combustible”, afirmó.
También, “solicitamos a la Justicia que se investigue cuál fue el destino de $1 billón que se recaudó a través del Impuesto PAIS y que estaban destinados a obras de infraestructura”, indicó.
“Por decisión del gobernador Axel Kicillof, la provincia de Buenos Aires seguirá trabajando para que las rutas estén en condiciones”, subrayó.
Cabe recordar que la obra de la variante de Chacabuco, de 23 kilómetros, había estado paralizada durante más de dos años, entre diciembre de 2018 y el 4 de enero de 2021. El proyecto consiste en la construcción de una autopista semiurbana, con dos carriles por mano, entre el Acceso Este a Chacabuco (km. 196) y el Acceso Oeste (km. 219), además de cinco puentes distribuidores.
Según habían informado de Obras Públicas, la obra (que estuvo paralizada con el 8 por ciento) posee un avance de más del 75 por ciento (con una primera capa de asfalto) y se estimaba que esté finalizada en el primer semestre de 2024.
Los intercambiadores vehiculares se encuentran ubicados en el kilómetro 196, donde inicia el bypass; a la altura de Cucha Cucha (km. 200,8); del cruce con la Ruta Provincial 30 (km. 205,2); del cruce con el ferrocarril San Martín (km. 209,5) y en el kilómetro 219.
Es importante mencionar que en el cruce de la Ruta 30 y la futura variante, se construyó un desvío provisorio para poder construir el distribuidor, ya que la calzada provincial se eleva por sobre la autopista.
Respecto a las capas de pavimento, que conforman el paquete estructural, se encuentran: subrasante tratada con cal en 30 centímetros de espesor; sub base de suelo de cal en 30 centímetros de espesor; base de estabilizado granular en 20 centímetros de espesor; base Inferior de concreto asfáltico con asfalto convencional en 9 centímetros de espesor; base superior de concreto asfáltico con asfalto modificado en 7 cm de espesor; y carpeta de rodamiento de microconcreto asfáltico en caliente tipo MAC F10 con AM3 en 3 centímetros de espesor.
“Falta ejecutar una nueva carpeta asfáltica, los guardarrailflexbeam, la demarcación, cartelería e iluminación”, habían informado desde Vialidad Nacional.
A principios de noviembre de 2023, el Ministerio de Obras Públicas avanzaba con las obras de transformación en autopista de la Ruta 7, entre Chacabuco y Carmen de Areco, donde ya se había intervenido cerca de la mitad de dicho tramo en poco más de un año.
Según habían informado de Vialidad, se trabajaba en el movimiento de suelo para los terraplenes a la altura del kilómetro 180. Además, se ejecutaban las bases de la calzada y el hormigón en plateas, tabiques y losas de las alcantarillas a lo largo del tramo de 55 kilómetros.
El Gobierno nacional trabaja en uno de los temas estructurales que preocupa a los millones de argentinos y miles de extranjeros, sobre todo, de países limítrofes que transitan las rutas nacionales. El Estado central de Argentina tiene la predisposición de mejorar las arterias que conectan las diferentes provincias entre sí y que, llegan a la Ciudad de Buenos Aires por donde millones de personas pasan a diario.
Para la concreción de la tarea el gobierno nacional hizo oficial la privatización del mantenimiento de más de 8.500 kilómetros de rutas nacionales en varias de las 24 provincias que conforman el país. Será bajo la concesión de peajes, permitiendo brindar un mejor servicio a los usuarios y, bajar el gasto público en más 6.100 millones de dólares.
La decisión fue dada a conocer de manera formal a través del Boletín Oficial, mediante el Decreto 9772025.
El mismo tiene por objetivo la “privatización total de Corredores Viales S.A. bajo la modalidad de concesión de obra pública por peaje, en los términos de la Ley N.º 17.520; delegando en el Ministerio de Economía la facultad para efectuar el llamado para dar inicio al proceso licitatorio por etapas de la Red Federal de Concesiones”.
En este sentido, la etapa abarca licitar en 11 tramos de rutas nacionales más de 8.500 kilómetros, de los cuales, 5.800 están concesionados por la empresa pública Corredores Viales S.A.
Teniendo en cuenta las necesidades particulares, el Ministerio de Economía tiene la palabra para modificar la conformación de las obras, además de la exclusión o incorporación como la división de los tramos propuestos y las rutas que los conforman.
Tal como expresa la letra del comunicado, “la privatización por concesión permitirá realizar la extinción de los contratos de concesión vigentes y el posterior cierre de la empresa Corredores Viales S.A. que significó, sólo en 2023, un resultado negativo superior a los $142 mil millones. Todo ello, en pos de generar nuevas concesiones destinadas a capitales privados que permitirán generar un ahorro en los gastos del Tesoro nacional de, aproximadamente, 6.100 millones de dólares.
Cabe recordar que el nuevo sistema no contará con ningún subsidio por parte del sector público, que hasta el momento realizaba aportes para sostener un esquema de concesión deficitario y que no brindaba beneficios reales para los usuarios. Vialidad Nacional, será la autoridad encargada de supervisar y controlar los contratos de concesión actuales y futuros, asegurando su cumplimiento en beneficio de los usuarios y el desarrollo de la infraestructura vial.
La Red Federal de Concesiones abarca un total de 9.342,04 kilómetros distribuidos en trece tramos que representan el 20 % de la red vial nacional, pero que concentran, junto con el resto de la red vial concesionada, el 80 % del tránsito. Entre ellos se encuentran los tramos Oriental y Conexión, anunciados en la etapa I, actualmente en etapa de convocatoria a audiencias públicas en curso".
Además, le ofrece al usuario varias ventajas tales como: "El sistema ofrece ventajas para los usuarios por sobre las concesiones actuales, contemplando tarifas tope máximas que podrán ofertarse. Cabe destacar que las tarifas vigentes al momento de la oferta no podrán modificarse hasta que la empresa asegure las óptimas condiciones de circulación en las trazas, contemplando parámetros como: bache cero, calce de banquinas, señalización horizontal y vertical e iluminación”.
Con el foco puesto siempre en desarrollar un sistema de rutas modernas y seguras que conecte a todo el país para generar encuentros sociales y crecimiento económico, Vialidad Nacional realizará un control pormenorizado de acuerdo a resultados de las calzadas permitiendo obtener información constante y minuciosa respecto del estado de las rutas nacionales y que estas garanticen seguridad en la circulación.