De 547 a 539 empleados en Arenales: diez años de planta equilibrada

Desde diciembre de 2015 hasta junio de 2025, el gobierno municipal de General Arenales ha sostenido una política clara y coherente en el manejo de los recursos humanos del Estado local.

"Con una mirada responsable, comprometida con la transparencia y la austeridad, se logró mantener una planta de personal equilibrada, sin caer en el descontrol del gasto ni en prácticas clientelares que sobrecargan el funcionamiento del Estado", sostuvieron.

Al asumir la intendencia, Erica Revilla recibió un municipio con 547 empleados. A lo largo de estos casi diez años, la gestión logró garantizar los servicios esenciales, ampliar significativamente las prestaciones municipales —especialmente en el área de salud— y, al mismo tiempo, mantener una estructura de personal estable, eficiente y con criterios de sostenibilidad.

Durante este período se incorporaron nuevos servicios que impactaron directamente en la calidad de vida de los vecinos. Entre ellos se destacan la creación de equinoterapia, la puesta en marcha del laboratorio de análisis clínicos en el hospital municipal, la inauguración del servicio de terapia intensiva, la apertura de un área específica de salud mental y la creación de la Dirección de Género, un espacio institucional destinado a promover políticas de igualdad y prevención de la violencia por motivos de género. También se creó, entre otras, la Oficina de Regularización Dominial, una política pública clave que permitió que más de 800 familias del distrito pudieran acceder a la escritura de su casa, garantizando la seguridad jurídica sobre sus bienes.

Estas políticas públicas demandaron compromiso, planificación y una asignación responsable de los recursos humanos. A junio de 2025, la planta municipal cuenta con 539 trabajadores, de las cuales 6 liquidaciones corresponden a anticipos jubilatorios. Es decir, incluso por debajo del nivel con el que comenzó esta etapa de gobierno. Este dato refleja el compromiso asumido desde el primer día: hacer del municipio una institución ordenada, transparente y orientada al servicio de la comunidad.

La austeridad no fue excusa para el ajuste, sino una herramienta para cuidar los recursos y garantizar una gestión eficiente que prioriza lo importante: mejorar la calidad de vida de las personas.